Mientras trabajaban en el sótano de la parte barroca de la catedral de Świdnica, los trabajadores descubrieron una habitación hasta ahora desconocida que contenía los huesos de al menos 38 personas, entre ellas tres niños. Uno de los científicos que estudia el descubrimiento es el Prof. Jacek Szczurowski, antropólogo de la Universidad de Ciencias Ambientales y de la Vida de Wrocław.
La cripta, descubierta durante las obras relacionadas con la preparación de los lugares de enterramiento de los obispos de Świdnica, probablemente sirvió durante muchos años como sala para el traslado de huesos. Los investigadores aún no saben si los restos procedían de otro lugar de la iglesia o del cementerio contiguo al templo.
«Encontrar y explorar los restos es solo el comienzo de la investigación, de la que aprenderemos, entre otros, por qué murieron las personas cuyos restos fueron colocados en la cripta, cuál era su edad, cómo comían y de qué clase social provenían», dice el Prof. Szczurowski citado en el sitio web de la Universidad.