Los astrónomos de la Universidad Nicolás Copérnico de Toruń, en cooperación con investigadores de los Países Bajos y Suecia, registraron dos ráfagas rápidas de radio (Fast Radio Bursts, FRB) de la Vía Láctea. Los FRB son ráfagas de radiación de milisegundos registrados en ondas de radio.
Estos son los fenómenos extremadamente poderosos: la energía liberada puede ser hasta 10 millones de veces mayor que la energía de la radiación solar. Hasta abril de 2020, todas las explosiones que los astrónomos pudieron ver procedían de distancias cosmológicas de cientos de millones de años luz. Esta vez, la fuente resultó ser una magnetoestrella de nuestra galaxia, informa la Universidad.
La fuente, ya conocida por los investigadores, observó radiotelescopios RT1 en Westerbork en los Países Bajos, dos en Onsala en Suecia y un RT-4 de 32 metros de Cellars cerca de Toruń. El último día de la investigación se registró dos destellos más. Los investigadores desconocen cuál es su causa, las hipótesis incluso incluyen el funcionamiento de civilizaciones extraterrestres.
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