Visitar sitios web, comprar en línea, reproducir canciones, ver perfiles en Facebook o mensajes publicados en las redes sociales, es decir, los rastros que dejan los usuarios de Internet son un tesoro de datos que se pueden usar para influir en nuestro comportamiento.

Así lo constató un equipo de investigación del Dr. Michał Kosinski, un psicólogo de la Universidad de Stanford, graduado de la Universidad SWPS. “Nuestra investigación previa ha demostrado que se puede predecir con precisión las características psicológicas de una persona mediante acceder a su perfil de Facebook. Sin embargo, ahora hemos demostrado que las empresas pueden preparar las publicidades en función de los perfiles psicológicos y sin consentimiento de los usuarios. Por ejemplo, dar un like a la página «Eventos» en Facebook correlacionada con la extraversión, mientras que un like a «Stargate» va de la mano con la introversión. Esas informaciones dan base al proceso de targeting – selección dentro de todos segmentos, el o los que nos interesan”, explica el Dr. Kosinski.

El experto subraya que los hallazgos podrían ayudar en el desarrollo del sistema de leyes, reglamentos y recursos de información para prevenir el uso inadecuado de esta tecnología.