Un grupo internacional que incluye científicos de la Universidad Tecnológica de Wrocław investigó el problema de la sobrecarga informativa, una condición en la que recibimos más información de la que podemos procesar. La investigación se publica en Nature Human Behavior.
„El espacio de información debe ser tratado de la misma manera que el entorno natural que nos rodea, donde la contaminación afecta nuestro bienestar. La sobrecarga informativa diaria provoca una sobrecarga cognitiva y, combinada con la fatiga, la presión del tiempo y la capacidad limitada de la memoria de trabajo, nos dificulta realizar tareas”, explica el Prof. Przemysław Kazienko, científico del Departamento de Inteligencia Artificial.
Entonces, ¿qué hacer cuando se produce una sobrecarga informativa? A nivel individual, por ejemplo, podemos limitar y controlar el uso excesivo de los teléfonos inteligentes mediante aplicaciones de protección que miden el tiempo pasado en línea. Sin embargo, en el caso de las organizaciones, podemos capacitar a los empleados en el uso adecuado de las herramientas de comunicación e Internet.
